La catadura del PP se perpetúa como subpolítica barriobajera con incipiente moral. Arremeten contra los cuerpos de Seguridad del Estado por esposar a los detenidos (acto que la policía tiene obligación de ejecutar) del caso “Palma Arena”, entre los cuales, se encuentran el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Palma de Mallorca, Rafael Durán y el ex director general de Deportes de la época de Jaume Matas. Aseguran también que sus dirigentes son espiados y sufren una persecución y conspiración por mandato del Ministerio del Interior, y ahora Ricardo Costa, Secretario de Organización del PP valenciano, relacionado con la trama Gürtel, y a día de hoy, señalado por los medios de comunicación, como uno de los más implicados en la supuesta financiación ilegal del PP en Valencia, dice que se va a querellar contra los policías porque las acusaciones vertidas hacia su partido, son fruto de un montaje policial auspiciado desde el Ministerio del Interior.
Por otro lado, tenemos al demagogo y Diputado palentino Ignacio Cosidó, alarmando con el aumento de delincuencia y pidiendo más efectivos policiales. ¡Tremendo despropósito y manipulación de intereses!. Tachan a la policía de delincuentes y luego quieren salir como sus salvadores. El señor Cosidó debería asegurarse mejor, de quién crea alarma social delinquiendo en España, solo tiene que asomarse todos los días al quiosco para ver caras muy conocidas. También debería informarse con más detenimiento de las estadísticas, pues las tiene un tanto desfasadas, cualquier día nos va a traer para meter miedo a la población, las que tuvieron ellos cuando gobernaba el PP que fueron las peores de la historia democrática.
Cosidó no para de hacerse fotos con sindicatos policiales alzándose en paladín y defensor de sus necesidades (sin aclarar su proyecto), mientras su partido les deslegitima, denigra y acusa, solo por salvar algún culo de la quema Gürtel (¿no dicen que son inocentes?, ¿Qué temen).
La policía ha presentado indicios suficientes de implicaciones en supuestos casos de corrupción a cargos del Partido Popular, sin embargo, los populares se permiten el lujo de difundir en voz alta sus alegatos de inocencia, refugiándose en decisiones donde el compadreo de algún “más que amigo” tiene mucho que contar, sin presentar nada que acredite la veracidad de sus exculpaciones y señalando con el dedo de la culpabilidad a los socialistas. Esas son las características que los mantiene unidos, indecencia y cobardía.
Estamos siendo testigos pasivos de la legitimación de la inmundicia, la colonización de la desvergüenza y la bellaquería en cargos políticos pagados con el dinero de todos los españoles. Los líderes del Partido Popular no están demostrando su interés por extirpar esa podredumbre de nuestro Estado de Derecho, por lo que se convierten en piezas importantes del motor que aniquila nuestra Democracia. No nos quedemos de brazos cruzados.
Si estaríamos juagando una partida de barcos:
Bárcenas, tocado; Camps, tocado; Costa, tocado; Granados, tocado; Aguirre, tocada; Cospedal, tocada; Rajoy, tocado; PP…………………………………………. hundido.
Por otro lado, tenemos al demagogo y Diputado palentino Ignacio Cosidó, alarmando con el aumento de delincuencia y pidiendo más efectivos policiales. ¡Tremendo despropósito y manipulación de intereses!. Tachan a la policía de delincuentes y luego quieren salir como sus salvadores. El señor Cosidó debería asegurarse mejor, de quién crea alarma social delinquiendo en España, solo tiene que asomarse todos los días al quiosco para ver caras muy conocidas. También debería informarse con más detenimiento de las estadísticas, pues las tiene un tanto desfasadas, cualquier día nos va a traer para meter miedo a la población, las que tuvieron ellos cuando gobernaba el PP que fueron las peores de la historia democrática.
Cosidó no para de hacerse fotos con sindicatos policiales alzándose en paladín y defensor de sus necesidades (sin aclarar su proyecto), mientras su partido les deslegitima, denigra y acusa, solo por salvar algún culo de la quema Gürtel (¿no dicen que son inocentes?, ¿Qué temen).
La policía ha presentado indicios suficientes de implicaciones en supuestos casos de corrupción a cargos del Partido Popular, sin embargo, los populares se permiten el lujo de difundir en voz alta sus alegatos de inocencia, refugiándose en decisiones donde el compadreo de algún “más que amigo” tiene mucho que contar, sin presentar nada que acredite la veracidad de sus exculpaciones y señalando con el dedo de la culpabilidad a los socialistas. Esas son las características que los mantiene unidos, indecencia y cobardía.
Estamos siendo testigos pasivos de la legitimación de la inmundicia, la colonización de la desvergüenza y la bellaquería en cargos políticos pagados con el dinero de todos los españoles. Los líderes del Partido Popular no están demostrando su interés por extirpar esa podredumbre de nuestro Estado de Derecho, por lo que se convierten en piezas importantes del motor que aniquila nuestra Democracia. No nos quedemos de brazos cruzados.
Si estaríamos juagando una partida de barcos:
Bárcenas, tocado; Camps, tocado; Costa, tocado; Granados, tocado; Aguirre, tocada; Cospedal, tocada; Rajoy, tocado; PP…………………………………………. hundido.
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