La vorágine de la construcción que hemos vivido años atrás y la demanda de viviendas, ha hecho que los edificios de las ciudades hayan ido absorbiendo terreno al campo. Lugares antes inhóspitos, hoy se vislumbran urbanizados y llenos de vida.
Palencia también esta incluida en esta descripción de ciudad, aunque no sea exactamente del tipo de ciudad sobre lo que pretendo escribir, sino, de las adversidades que “dicen” sufrir los vecinos y sus asociaciones que se van ubicando allí donde nace un nuevo barrio o barriada.
Qué podemos decir de la última queja que ha presentado la Asociación de Vecinos “Nueva Balastera”, o sector 8 (No les gusta que así se llame), que con el inicio de las fiestas de San Antolín y su cercanía al recinto ferial, han trasladado al Ayuntamiento palentino “la idea” de que, cambien la ubicación del circo, pues está próximo a un edificio en el que viven cuarenta personas y los ruidos, mal olor y peligrosidad por la tenencia de animales, se hace insoportable, manifestando que esta reivindicación ya se hizo el año pasado y no se ha hecho nada al respecto.
Aquí debemos acordarnos de aquello, “que fue antes, el huevo o la gallina”. Está muy claro, el recinto ferial y todo lo que conlleva la celebración de las fiestas, estaban allí ubicados muchos años antes de que se construyeran pisos y sus vecinos los habitasen. Es verdad que los pisos de esta zona salieron a su venta a un precio medianamente alcanzable para el común de los mortales en mitad de la vorágine urbanística y fueron comprados con frenesí, no se si para vivir o para invertir. Quizás los que ahora demandan un cambio circense en la zona, no son conscientes de que en el precio, también iba incluido el ferial, el campo de fútbol (con posibles conciertos) y demás tralla festiva. Incluso la distancia que les separa del centro de la ciudad, los talleres y empresas de los polígonos industriales, el arroyo de Villalobón, la circulación del vial y hasta los fuegos artificiales.
Si ahora les molesta el circo, mañana serán las voces de los aficionados del Palencia C.F. y pasado el ruido de la circulación y quien sabe, no les empiece a dar mal rollo los tanatorios y el cementerio, que también están cerquita cerquita.
Algo parecido pasa en el barrio de “Santiago” con la Fábrica de Armas, donde algunos vecinos aseguran no poder vivir con los ruidos que provocan las pruebas de tiro que allí se efectúan. O como pasó en “San Antonio” con la electrolisis, que no pararon hasta que no la vieron cerrada, pues el olor y el humo que salía por sus chimeneas les ensuciaba la ropa recién lavada. Y qué decir de los nuevos vecinos que ha recibido las proximidades de la fábrica de café, “La Seda”, que afirman no pueden respirar porque a veces en el ambiente hay “polvillo” de café que también les mancha las casas y la ropa.
¿Qué les parecería a todos estos vecinos, si los demás pondríamos sus puestos de trabajo en juego, por problemas de los que somos conocedores cuando elegimos una zona para vivir?. Ahora no pueden pretender poner la ciudad patas arriba, utilizando a los menores como arma arrojadiza por sus juegos en los parques de esos barrios. Mucho menos hacer responsable al Ayuntamiento de Palencia que pagamos todos los palentinos por los males que ya conocían. Una ciudad no puede cambiar dependiendo de las necesidades de cada individuo, y mucho menos puede pretender hacerlo de la noche a la mañana. La estructura y organización de una localidad lo va marcando el tiempo, y este es el que tiene que ir dictaminando su forma. No deben olvidar que solo son parte de la ciudad, y en esta decidimos todos los palentinos.
Convivir no es solo sonreír y llevarse bien con el vecino de al lado, es también respetar las necesidades y el pan del resto.
Otro día hablaremos de algunos presidentes de asociaciones de vecinos que utilizan supuestas necesidades de sus barrios para hacer campaña política.
Palencia también esta incluida en esta descripción de ciudad, aunque no sea exactamente del tipo de ciudad sobre lo que pretendo escribir, sino, de las adversidades que “dicen” sufrir los vecinos y sus asociaciones que se van ubicando allí donde nace un nuevo barrio o barriada.
Qué podemos decir de la última queja que ha presentado la Asociación de Vecinos “Nueva Balastera”, o sector 8 (No les gusta que así se llame), que con el inicio de las fiestas de San Antolín y su cercanía al recinto ferial, han trasladado al Ayuntamiento palentino “la idea” de que, cambien la ubicación del circo, pues está próximo a un edificio en el que viven cuarenta personas y los ruidos, mal olor y peligrosidad por la tenencia de animales, se hace insoportable, manifestando que esta reivindicación ya se hizo el año pasado y no se ha hecho nada al respecto.
Aquí debemos acordarnos de aquello, “que fue antes, el huevo o la gallina”. Está muy claro, el recinto ferial y todo lo que conlleva la celebración de las fiestas, estaban allí ubicados muchos años antes de que se construyeran pisos y sus vecinos los habitasen. Es verdad que los pisos de esta zona salieron a su venta a un precio medianamente alcanzable para el común de los mortales en mitad de la vorágine urbanística y fueron comprados con frenesí, no se si para vivir o para invertir. Quizás los que ahora demandan un cambio circense en la zona, no son conscientes de que en el precio, también iba incluido el ferial, el campo de fútbol (con posibles conciertos) y demás tralla festiva. Incluso la distancia que les separa del centro de la ciudad, los talleres y empresas de los polígonos industriales, el arroyo de Villalobón, la circulación del vial y hasta los fuegos artificiales.
Si ahora les molesta el circo, mañana serán las voces de los aficionados del Palencia C.F. y pasado el ruido de la circulación y quien sabe, no les empiece a dar mal rollo los tanatorios y el cementerio, que también están cerquita cerquita.
Algo parecido pasa en el barrio de “Santiago” con la Fábrica de Armas, donde algunos vecinos aseguran no poder vivir con los ruidos que provocan las pruebas de tiro que allí se efectúan. O como pasó en “San Antonio” con la electrolisis, que no pararon hasta que no la vieron cerrada, pues el olor y el humo que salía por sus chimeneas les ensuciaba la ropa recién lavada. Y qué decir de los nuevos vecinos que ha recibido las proximidades de la fábrica de café, “La Seda”, que afirman no pueden respirar porque a veces en el ambiente hay “polvillo” de café que también les mancha las casas y la ropa.
¿Qué les parecería a todos estos vecinos, si los demás pondríamos sus puestos de trabajo en juego, por problemas de los que somos conocedores cuando elegimos una zona para vivir?. Ahora no pueden pretender poner la ciudad patas arriba, utilizando a los menores como arma arrojadiza por sus juegos en los parques de esos barrios. Mucho menos hacer responsable al Ayuntamiento de Palencia que pagamos todos los palentinos por los males que ya conocían. Una ciudad no puede cambiar dependiendo de las necesidades de cada individuo, y mucho menos puede pretender hacerlo de la noche a la mañana. La estructura y organización de una localidad lo va marcando el tiempo, y este es el que tiene que ir dictaminando su forma. No deben olvidar que solo son parte de la ciudad, y en esta decidimos todos los palentinos.
Convivir no es solo sonreír y llevarse bien con el vecino de al lado, es también respetar las necesidades y el pan del resto.
Otro día hablaremos de algunos presidentes de asociaciones de vecinos que utilizan supuestas necesidades de sus barrios para hacer campaña política.
foto:Palencia aérea
10 comentarios:
Joder, comos os chuleáis los niños bien que vivís en la puebla. Así somos todos progres.
Desde luego, que pronto nos quitamos la careta, eh. Si estás mal en tu barrio, te jodes. Vamos, para incluirlo corriendo en el próximo programa electoral.
¡Cómo si nada cambiara y todo se mantuviera inmutable! A ver si uno por adquirir un inmueble en un determinado lugar asume también circunstancias ajenas a ésta por las que no va a poder protestar como si estuviera en la Cuba castrista. Joder, cómo se les nota el ramalazo nazi a algunos...
Hoy no nos hemos puesto en plan ecolojeta, sino que bendecimos el urbanismo frente a los lugares inhópitos. ¿contradicción?, No, cuestión de conveniencia.
Hay que ser un estúpido y completamente idiota para no darse cuenta de que ante el crecimiento de una ciudad, ésta sufre transformaciones, que las necesidades cambian, y al modificarse la fisonomía urbana de un municipio, es probable que haya que cambiar los elemtnos que durante mucho tiempo permanecieron, pero que ahora pueden hacer inviable la vida a los que allí residen.
Algunos querrían que siguiéramos con caminos de cabras y sin asfaltar nada, porque, ¡claro, como eso ya estaba así, no se puede cambiar. Y luego dicen que los conservadores son otros... ¡qué poca vergüenza tienen algunos!
Por cierto, resulta bastante desagradable tener que leer textos tan mal escritos, así que a ver si le decías al amnuense de turno, que se lo curre un poco más la próxima vez.
Es lógico que los vecinos reivindinquen unas comodidades que les faciliten su calidad de vida. Pocas cosas hay hoy que estuvieran ahí en su momento. Ni la palza de toros ni el estado de fútbol ni muchas otras. Las cosas cambian, y por tanto, si surgen molestias como consecuencia de algunas cosas, lo normal es que un político intente remediar eso, y será más fácil cambiar la ubicación de la carpa de un circo temporal o asignar otro lugar al recinto ferial, que decirles a los vecinos que se vaya y se compren otro piso en un barrio de los caros donde viven los progres, que seguro que su economía de lo permite, sobre todo, gracias a los brotes verdes de Salgado, los parados de Corbaco, y las subidad de impuestos de Pepiño.
Igual que se han hecho nuevas contrucciones a conveniencia o de igual manera que ahora el insufrible Helio tiene toda Palencia levantada para nada, salvo para hacer propaganda del Plan E cuyo despilfarro es casi mayor en propaganda que en otra cosa, pues es lógico que puedan tener que cambiarse aquellas cosas que perjudiquen al ciudadano. A ver si ahora Palencia va a ser un yacimiento arquológico en el que poder hacer rotandas, pero que no se pueda atender la demanda de un solo vecino, pues sí que nos han salidos facistas en la neoprogresía.
Pasa lo mismo con la parida del tanatorio o el cementerio. Que yo sepa antes el cementerio estuvo en la Carcavilla, y aunque ahora algún chaval pueda encontrarse algún resto merced a lo de la Desmemoria Histórica, creo que no siguen los nichos en el parque rodeado de viviendas, ¿o sí? Por favoooor, no he visto mayor cantidad de gilipolleces juntas en mi vida.
Podríamos no, "pusiéramos", pero en cualquier caso, el cambio o modificación de ubicación no pone en peligro el trabajo de nadie, quien lo pone en peligro es quien por sus prejuicios ideológicos no acomete una reforma laboral que permita generar empleo. Y volviendo a lo local, uno puede seguir trabajand, y los que quieran ir al circo, a la fiera, o a la fábrica de lo que sea menester a realizar su trabajo, sólo que además no perjudicarán al prójimo. Pero parece que para la izquierda el fastidiar a los demás es una tendencia irrefrenable que no pueden abandonar.
Ahora si uno se inunda por el arroyo de Villalobón, se le dice que se vaya debajo del puente, y escondemos todo el trapicheo que haga falta, como con el informe de la Confederación Hidrográfica del Duero al respecto. Qué poca vergüenza.
Y eso de que la estructura y la forma de la ciudad la va cambiando el tiempo es otros despropósito. SI en un páramo pasan mil años, como no haya actividad humana, la estructura, salvo desastre natural o capricho de la naturaleza, seguirá igual. No, no, no. Quienes cambian la fisonomía de las ciudades o municipios son sus habitantes, las personas.
¿Cómo que sólo son parte? ¡Ah!, pues bien, en un edificio que no haya ascensor, pero personas mayores o minusválidas, voy y les digo que no se puede poner elevador ni ascensor, porque ¡claro! ellos sólo son parte, así que que se fastidien, que no se puede modificar la estética del edficio, y que eso sólo lo decide el tiempo. ¿es o no es una de las mayores mentecatadas que haya podido proferir el más inepto entre los imbéciles?
En lo que sí estoy de acuerdo es en lo de los presidentes de algunas asociaciones de vecinos y su clara politización, empezando por el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecino, a la que por cierto no pertenecen todas, José Luis Liedo, el comunista redomado que sólo sabe lamer el culo de Heliodoro en compañía de alguna de sus sucursales vecinales, pero creo que aquí se vaya habla precisamente de eso. Cosas del sectarismo...
"Anónimo dijo...
Joder, comos os chuleáis los niños bien que vivís en la puebla. Así somos todos progres.
27 agosto, 2009 09:55"
Tienes toda la razón. Así es la progresía de hoy, una panda de vagos analfabetos que pretenden ir dando lecciones mientras viven a costa de los demás y se permiten esa chulería tan repugnante, repulsiva y vomitiva.
Nunca había leído mayor número de memeces en tan corto espacio y en tan poco texto. Se han lucido con la entrada.
illera tío wenooo
tonterías, paridas y memeces... bla, bla, bla... lo típico de la izquierda actual... no se les puede pedir más... pobrecillos, qué pena!!!
La verdad que si que muchas gestoras y administraciones parece que sacan comision de muchas de las tareas que desempeñan para los vecinos, que muchos igual van a poner una cosa y parece que van a comision por los precios que pasan luego a los vecinos..
http://explainthisimage.com/
Este blog mantenido desde la sede del PSOE palentino es lo más descerebrado que se lee en la provincia. Ahora se menten con vecinos y demás. Le estáis haciendo un flaco favor a Heliodoro aunque a lo mejor lo que queréis es joderle bien. Aprended a escribir como el del Palencia Confidencial, que por lo menos da caña con algo más de gracia inteligente.
Desde luego, majo, eres imbécil.
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